Novedad legislativa: comentario al RDL 6/2019

Las juristas, como estudiosas del Derecho, sabemos cuándo un proyecto de ley tiene futuro de ser aprobado dependiendo del contexto político y social del momento en que se trate. Cuando una norma se hace esperar mucho tiempo, si llega, no podemos dejar de desmenuzar su contenido para conocer sus virtudes y defectos.

Si como dicen Paleo y Alonso (2015) en las conclusiones de su estudio relativo a las políticas de género, el ámbito de regulación del derecho español en materia de igualdad en el contexto de crisis, a la que le siguió un período de austeridad, se paralizó o se reorientó hacia la protección de la mujer embarazada coincidiendo con la presencia en el Gobierno de partidos de centro-derecha, podría decirse sin ambages que la llegada del PSOE al gobierno en el mes de junio de 2018, ha favorecido la aprobación del Real Decreto-ley 6/2019. Tiene 7 artículos, que modifican 7 normas con rango de ley abarcando temas relacionados con las políticas de igualdad.

Quizás su publicación en el BOE el día 7 de marzo haya sido la noticia del día pero el alcance que tendrá en los próximos años aún no puede apreciarse. ¿Qué cambia con la aprobación de esta norma?. Sintéticamente, he de destacar que su primer artículo viene a profundizar la importancia que tienen en las empresas los planes de igualdad corrigiendo el número mínimo de personas trabajadoras para la obligatoriedad de la herramienta, que pasan de ser en forma escalonada, de 250 a 150 en un primer tramo; de 100 a 150 en un segundo tramo y de 50 a 100 en un último tramo, con la aplicación paulatina de 1, 2 y 3 años, respectivamente. Otro punto relevante es la equiparación de la suspensión del contrato del progenitor distinto de la madre biológica que se regula en su artículo 2, ampliando los permisos por nacimiento de hijas o hijos de ambos progenitores, también aplicándose escalas temporales: desde el 1 de abril de 2019 tendrá una duración de 8 semanas, a partir del 1 de enero de 2020, de 12 semanas y desde el 1 de enero de 2021 a 16 semanas. Estos permisos incluyen a las personas que trabajan en el empleo público. También conviene resaltar que la financiación de las cuotas de los convenios especiales de los cuidadores no profesionales en situación de dependencia correrá a cargo de la Administración General del Estado y así, no se interrumpirá la cotización para las personas trabajadoras -mayoritariamente mujeres-, que deben abandonar su trabajo para cuidar a sus familiares y la creación de un Fondo de apoyo para la promoción y desarrollo de infraestructuras y servicios del Sistema de Autonomía y Atención a la Dependencia y de los Servicios Sociales. Asimismo, vale destacar que con lo prescripto en el articulo 7, las trabajadoras autónomas que regresen a su actividad después de su descanso por maternidad, se puedan acoger a una bonificación de sus cuotas que se traduce, en caso de que se opte por la base mínima de cotización en una cuota mensual, de 60 euros durante 12 meses y si opta por una base superior, se aplicará una bonificación del 80% sobre la cotización por contingencias comunes.

Recapitulando: si como analizamos en la Unidad temática 6 del Módulo Desigualdades, las políticas de igualdad son la principal respuesta institucional al problema de la falta de igualdad entre hombres y mujeres en las democracias occidentales que han desarrollado Estados de Bienestar, yo entiendo que esta nueva norma es un avance porque brinda una respuesta coyuntural a temas cruciales como son la economía del cuidado y la conciliación de la vida personal, familiar y laboral. Pero quizás esa no sea la solución definitiva para el caso español ya que Torns Martín (2011) advierte que las políticas europeas de conciliación basadas en permisos laborales para el cuidado de personas y los servicios de atención a la vida diaria (SAD), por la fuerte tradición familista de España, en la actualidad, en lugar de eliminar desigualdades entre hombres y mujeres, crean nuevas desigualdades de etnia, ya que se añade la presencia de una mujer emigrada, y por lo general, en situación de economía informal, para atender las tareas de cuidado mientras las mujeres se incorporan al mercado laboral. Las estadísticas y las futuras investigaciones nos dirán cuáles son los resultados de estas nuevas políticas que han sido de reciente aprobación.

BIBLIOGRAFÍA:

Real Decreto-ley 6/2019, de 1 de marzo, de medidas urgentes para garantía de la igualdad de trato y de oportunidades entre mujeres y hombres en el empleo y la ocupación. Publicado en: «BOE» núm. 57, de 07/03/2019. Recuperado de https://www.boe.es/buscar/act.php?id=BOE-A-2019-3244

Paleo, N. Alonso, A. (2014): “¿Es solo una cuestión de austeridad? Crisis económica y políticas de género en España”, Investigaciones Feministas, , vol. 5 36-68

Torns T. (2005): “De la imposible conciliación a los permanentes malos arreglos”, Cuadernos de Relaciones Laborales no1

Torns, T. (2011): “Conciliación de la vida laboral y familiar o corresponsabilidad: ¿el mismo discurso?. RIDEG, 01/11:5-13. Recuperado de https://core.ac.uk/download/pdf/13318575.pdf

La experiencia argentina en indicadores de género

Las mujeres estamos uniendo esfuerzos para desentrañar cuáles son los principales condicionantes que inciden en la desigualdad de género en el mercado laboral, teniendo presente que éste ultimo término se trata de una construcción teórica que deja afuera la valoración del trabajo doméstico.

Sabemos que en España, las herramientas que se utilizan para conocer cuál es la participación de la población en el mercado laboral, es a través de los censos, las encuestas y los registros administrativos. Con la encuesta de población activa (EPA) que lleva a cabo trimestralmente el Instituto Nacional de Estadística, en viviendas familiares y en 65.000 hogares, podemos obtener los indicadores clasificando a la población en activa o inactiva y en cuanto a la primera en ocupada o desempleada. También, se determinan las tasas de actividad, de ocupación y de paro.

Sin embargo, este sistema que está en consonancia con el sistema internacional de estadística de empleo, es un modelo que nunca ha sido norma para el empleo femenino (CARRASCO y MAYORDOMO). Por eso, la clasificación alternativa que proponen las teóricas feministas, se extienden a otros países que también están analizando la participación de las mujeres en el ámbito laboral, como es el caso que a continuación comentaré.

En Argentina, existe una organización nacida en el mes de mayo de 2015 que creó un espacio virtual y en las redes sociales con el objetivo de visibilizar la desigualdad de género difundiendo datos, estadísticas y contenidos académicos, cuyo nombre es Economía Femini(s)ta (EF). Conformado por mujeres economistas -principalmente-, filósofas así como del mundo del arte audiovisual, con colaboraciones en Berlín y Bogotá, construyen un espacio de reflexión con perspectiva de género.

Natsumi S. Shokida es la persona que trabaja en el equipo de Pobreza e Ingresos en la Encuesta permanente de Hogares del Instituto Nacional de Estadísticas y Censos y recientemente ha publicado un informe sobre los datos del tercer trimestre de 2018. Los datos que presenta la autora relacionados con los indicadores de género arrojan los siguientes resultados: la brecha de ingreso (sean de origen laboral o no laboral, como jubilaciones y pensiones, cuotas alimentarias, subsidios, etc.) revela que las mujeres, en promedio, perciben un 26,2% menos que los hombres; en cuanto a la brecha de ingresos mensuales de las personas ocupadas, asciende a 25,2% entre hombres y mujeres, en favor de ellos; también se ha medido la brecha de ingresos mensuales por calificación del puesto de trabajo en sus dos variantes que son en ocupaciones profesionales, siendo la tasa del 20,4% a favor de los hombres, en tanto que en los puestos no calificados, los varones perciben un 38,6% más que las mujeres y por último, en cuanto a la brecha de ingresos mensuales por nivel educativo, siendo que las mujeres ocupadas están en promedio más formadas que los hombres, la diferencia de ingresos a favor de los hombres es del 26,6% para las del nivel universitario/superior y del 46,2% para las que cuentan con nivel primario. Por último, quiero señalar del informe que en cuanto a la distribución de las tareas del hogar, del total de personas que realizan tareas de la casa, un 75% son mujeres y un 25% son hombres.

Hemos visto que son necesarios estos estudios para poner en cifras las desigualdades y exigir a los gobiernos que implementen políticas públicas que equiparen las cifras, utilizando otros parámetros y metodologías. En ese camino estamos las mujeres que hacemos economía feminista.

BIBLIOGRAFÍA:

Carrasco, Cristina y Mayordomo, Maribel. Universidad de Barcelona. Política y Sociedad, 34 (2000), Madrid (pp. 101-112)

Página web de Economía Femini(s)ta: Recuperado de http://economiafeminita.com/

Natsumi S. Shokida (2019): “La desigualdad de género se puede medir”. Recuperado de http://rpubs.com/natsumi_shokida/tercer_trim_2018

Una mirada ecofeminista del #Schoolstrike4climate

Dice Alicia Puleo (2011) que feminismo y ecologismo son indispensables en el siglo XXI y que desarrollar el diálogo entre ambos es una materia pendiente en los países de cultura latina. Para Yayo Herrero, el ecofeminismo es una práctica política, que en sus dos vertientes, una esencialista y la otra más bien, constructivista, nos ubica a las personas como seres ecodependientes, más precisamente, radicalmente interdependientes. Pero vivimos en un mundo donde se produce a golpe de trabajo, y como sigue diciendo Herrero, estamos frente al debate de cómo reorganizarlo porque hay una dimensión de no-trabajo, aquel que conforman las tareas de cuidado, que no es medido con la vara del dinero por el sistema capitalista de producción.
Hay una jovencita sueca llamada Greta Thunberg que en su página de Facebook creada el 7 de diciembre de 2018, al día de hoy la siguen 628.452 y en la descripción dice “16 Years Old Climate Activist with Asperger’s”. Su argumento frente al parlamento sueco al que se presentó apenas comenzó con su tarea de activista, es que la respuesta para frenar el cambio climático es hacer huelga escolar. Lo dice porque entiende que las respuestas y soluciones ya están dadas, lo que resta ahora es actuar frente a las evidencias. Por eso, Greta recorre los foros internacionales llevando su mensaje. Va por la semana 34 de huelga escolar y ya estuvo en varias ciudades. El 17 de abril se dirigió al Parlamento Europeo en la ciudad de Estrasburgo y al día siguiente habló en el Senado italiano. Según la Revista Times está entre las 100 personas más influyentes del mundo. Greta dice que no solo necesitamos una nueva política, necesitamos una nueva forma de pensar porque la crisis climática no solo está amenazando las condiciones de vida para miles de millones de personas, lo está haciendo con toda nuestra civilización. También indica que las personas más afectadas son las menos responsables.
En el documental “La teoría sueca del amor” asistimos al retrato de una sociedad avanzada y con un alto nivel económico de vida, donde la gente vive en solitario, las mujeres eligen ser madres sin pareja, las personas ancianas mueren sin que nadie los eche de menos, dejando bienes que nadie reclama. Todo lo contrario a lo que Yayo Herrero propone cuando dice que el cuidado cotidiano de los cuerpos vulnerables, hoy en día, está mostrándonos que vivimos tiempos para no estar solas y solos, todo lo contrario, la crisis que hoy vivimos sobre el modelo de reproducción social es producto de las tensiones que se generan entre las personas con el uso de nuestro tiempo.
Mientras tanto, Greta (al igual que se puede apreciar en el documental de Gardiner) es crítica con su país y lo dice en su página de Facebook, cuando el día 4 de abril publicó que se estaba produciendo el rebasamiento de Suecia, es decir, que para el resto de 2019 estaría viviendo fuera de los límites planetarios y estaría “robando” los presupuestos de carbono de las generaciones futuras y las personas en los países en desarrollo.
Explorando modos de vida que nos hagan reflexionar sobre el futuro, el concepto de ciudadanía pronunciado por Thomas Henry Marshall en 1949, en una sociedad donde según Agra Romero “un trabajador es un hombre que tiene una esposa económicamente dependiente que se encarga de sus necesidades, del hogar y de los niños”, no parecería ser una sociedad favorable para las mujeres, ya que debían contentarse con los beneficios que les proporcionaban sus maridos y ser ciudadanas en forma indirecta, de segunda (Campillo Poza). ¿Cuánto ha cambiado hoy este concepto de ciudadanía y cómo convertirlo en uno que sea amigable a las mujeres?. Siguiendo a Puleo (2011:435) “sostenibilidad es solidaridad con el conjunto de la ciudadanía, una ciudadanía ecológica que no conoce fronteras y con la cual nos comprometemos a preservar el espacio de vida en común”.
Para mí Suecia es hoy el llamamiento urgente de Greta, la convocatoria que hace a sus pares, jóvenes de todas partes del mundo a que se sumen a una iniciativa que lleva el empuje de la esperanza de vivir en un mundo mejor, donde mujeres y hombres vivamos en igualdad.

BIBLIOGRAFÍA:

Puleo, Alicia (2011): Ecofeminismo para otro mundo posible. Madrid : Cátedra.

Yayo Herrero: Propuestas ecofeministas para transitar a un mundo justo y sostenible. Recuperado de https://www.youtube.com/watch?v=Eq-jysIgnIs

“El argumento cautivador para actuar ya ante el cambio climático” Greta Tunberg TEDxStockholm Recuperado de https://www.ted.com/talks/greta_thunberg_the_disarming_case_to_act_right_now_on_climate?language=es

“The Swedish Theory of Love” (2016) dirigido por Erick Gandini. Recuperado de https://www.youtube.com/watch?v=3YUlCMiMXN8

“Ciudadanía: el debate feminista” de M.a Xosé Agra Romero

“La ciudadanía social. Perspectivas y propuestas feministas” de Inés Campillo Poza